SAN JOSÉ, Costa Rica—Este mes, Humane Society International/Latinoamérica brindó capacitación avanzada a las autoridades del gobierno costarricense y otras instituciones de protección animal para combatir las peleas ilegales de perros y de gallos. La sesión educativa de dos días contó con la participación de más de 50 representantes de entidades como el Ministerio Público, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y el Servicio Nacional de Salud Animal (SENASA).
La capacitación abordó temas como el vínculo entre la crueldad animal y la violencia humana; el marco regulatorio de las peleas de animales en Costa Rica, y las conexiones de estas peleas con otras actividades ilegales, como el narcotráfico y el crimen organizado. También se ofreció capacitación especializada sobre técnicas investigativas y recolección de evidencias, tanto en peleas organizadas de perros, como las de gallos.
Andrea Borel, directora ejecutiva de HSI/Latinoamérica, señaló: “Con este entrenamiento, quisimos brindar herramientas que contribuyan a la investigación, protocolización y abordaje de estas prácticas ilegales y crueles en Costa Rica. Las peleas de animales equivalen a maltrato animal con fines de entretenimiento y no tienen cabida en nuestra sociedad”.
Las peleas de gallos son una práctica sangrienta en la que dos o más aves criadas específicamente para pelear son colocadas en un redondel conocido como “gallera”, con el propósito de entretener a los espectadores y apostar dinero. Por su parte, las peleas de perros son también actividades ilegales, de crueldad extrema, en las que se cría, condiciona y entrena a los perros para pelear, con esos mismos fines.
Por lo general, estas peleas resultan en la muerte de uno o ambos animales involucrados. Aquellos que no mueren, sufren terriblemente a raíz de las heridas generadas y por no recibir tratamiento. Incluso, los perros pueden llegar a ser sacrificados de la forma más cruel por parte de sus dueños. Ambos tipos de peleas van de la mano con otras actividades ilícitas, por ejemplo, el tráfico de drogas, armas y personas.
En Costa Rica, el Código Penal (artículo 279) sanciona con penas de tres meses a un año de prisión a quien organice, propicie o ejecute peleas entre animales de cualquier especie, sin excepción alguna en el territorio nacional.
FIN
Contacto para medios: Alejandra Zuniga: 7012-5598; commsLatAm@hsi.org